Adelmo Mereslofer se marcha una temporada a la costa de Bedok (Singapur). Los que le conocen saben los motivos de esta indefinida ausencia. Al resto, Adelmo les dice que algún día, tarde o temprano, volverá.
Sábado, 9 de marzo de 2013
domingo, 4 de noviembre de 2012
Diecinueve
Descansa, cielo mío, vida que me da la vida, amor de todo lo que rodea
mi existencia, esencia de los más bellos secretos del pasado, aurora
terrenal de mis ancestros, tú que me guías por el camino del sacrosanto
placer que siento ante tus labios.
Si en la vida de todas las personas siempre hay un cuarto de hora difícil de explicar, creo que hoy vivimos uno de ellos. Uno más, quiero decir, porque ya he perdido la cuenta de la cantidad de momentos en esta historia que me han parecido imposibles, inexplicables o directamente de otro mundo. Probablemente hoy descanse, sí, y pensaré sobre la vida, y sobre todo aquello que no vive, o no sobrevive, y dormiré sobre un lecho de palabras con nuevos significados, palabras como estremecimiento, sonrisa, túnel, amanecer, sueño, besos… Cuando llegue mañana seguiré amándote como sólo tú sabes hacerlo.
Si en la vida de todas las personas siempre hay un cuarto de hora difícil de explicar, creo que hoy vivimos uno de ellos. Uno más, quiero decir, porque ya he perdido la cuenta de la cantidad de momentos en esta historia que me han parecido imposibles, inexplicables o directamente de otro mundo.
ResponderEliminarProbablemente hoy descanse, sí, y pensaré sobre la vida, y sobre todo aquello que no vive, o no sobrevive, y dormiré sobre un lecho de palabras con nuevos significados, palabras como estremecimiento, sonrisa, túnel, amanecer, sueño, besos…
Cuando llegue mañana seguiré amándote como sólo tú sabes hacerlo.